31ª jornada de Premier League

El Super Sunday deja al ManU con medio título en el bolsillo

El United fue muy superior. Sin llegar a su mejor nivel completó un gran partido colectivamente. Después de sus últimos partidos grises, dio el golpe de mano en el momento indicado contra su eterno rival, el Liverpool, al igual que el año pasado. Fue un 3-0 contundente en Old Trafford que se vistió de gala con dos grandes aficiones que no pararon de cantar. Ferguson introdujo una importante variante en su once, añadió un mediocentro para ganar la partida en la medular y le salió cara. Además de por la lección de clase en la dirección de Scholes secundado por la presencia de Carrick, la inclusión de Anderson por delante del doble pivote fue acertada. Rooney solo en la delantera desquició con sus desmarques pese a su falta de definición. Desde el banquillo, el primer punto se lo añadió el técnico escocés. Después de una primera parte disputada, en la que Brown siguió la tradición de los defensas que marcan al Liverpool (Silvestre en 2004, Ferdinand en 2006, O’Shea en 2007) una acción puntual marcó el devenir del duelo. En una semana donde habían avisado de la severidad de los árbitros, Mascherano se dedicó a protestar y se autoexpulsó. Actuación lamentable del argentino, que mató definitivamente a su equipo dejándolo en inferioridad numérica, cargándose un choque hasta el momento igualado. Pese a que el árbitro no estuvo acertado (otra vez más Steve Bennett la lió), el Manchester demostró su superioridad futbolísticamente. La segunda parte no tuvo historia, el Liverpool se defendió dignamente como pudo ante la avalancha del Manchester United, que amplió la ventaja cuando a los reds no le quedaron fuerzas para más. Cristiano Ronaldo calcó el primer gol para hacer el segundo, anticipándose de cabeza y aprovechando la mala salida de Reina (insuperable en el mano a mano, falló clamorosamente en las salidas por alto). Ronaldo marcaba al Liverpool después de otro partido insulso ante un grande, nulo en el desborde y desastroso en la definición. El golpe definitivo lo dio Nani, que mostró su descaro poco después de salir con un disparo lejano imparable. Este triunfo afianza en el liderato al Manchester, con 5 puntos de ventaja que parecen complicados de salvar.

Treinta minutos después, en Stamford Bridge llegaba la hora de comprobar que aspirante llegaba con más fuerzas. El Arsenal continuó la senda de los últimos partidos, 5 suma ya con este sin ganar, y por su estado moral se puede considerar que no va a estar en la pelea por el título. En cambio, al Chelsea todavía tiene que jugar un partido directo frente al líder en casa, y ellos confían en sus posibilidades. El partido en sí se vivió con intensidad, la primera parte estuvo más controlada, aunque a partir de la media hora ambos equipos vieron que llegaba el momento de atacar, ya que a ninguno le valía el empate. Se llegó al descanso en tablas pese a las llegadas claras de los dos, especialmente del Chelsea. En la segunda mitad se adelantó el Arsenal gracias a Sagna, en un corner mal defendido por los blues al dejar el primer palo al descubierto. Avram Grant acertó sobre la marcha esta vez, pasó a la acción y cambió el 4-3-3 inicial a un 4-2-4 mucho más atrevido, imparable para la retaguardia gunner. Muy flojito en general el Arsenal, los locales liderados por un gran Ballack remontaron aplastando a su rival, con el mejor Drogba sobre el campo reaccionando a tiempo para poner un 2-1, que incluso se quedó corto ante la diferencia que hubo entre unos y otros. Jugando así, se gana a los grandes, pero el Chelsea no ha mostrado este nivel durante otros tramos y ahí están los puntos que ahora echa en falta. Ha sido un año de juego vulgar. De todos modos, Lampard ya ha avisado en rueda de prensa, confían en ganar todos los partidos que quedan.

Estos dos partidazos quedaron para el domingo, pero el sábado se disputó el resto de la jornada y todavía están en el aire la mayoría de luchas, por lo que vivimos un aperitivo interesante. La jornada se abrió con el Tottenham – Portsmouth, con los visitantes jugándose la Uefa. Pocos alicientes, el Pompey varió su esquema habitual, pasando a un 4-5-1 con triangulo en el centro del campo buscando la contra, pero con la baja de su hombre en mejor forma, Defoe, que no jugó ante su antiguo equipo. La posesión fue total para los spurs, Keane, Berbatov o Dawson avisaron en el primer tiempo, pero el gol se hizo de rogar. Bent y O’Hara entraron juntos mediada la segunda parte, y suyos fueron los dos goles, prácticamente seguidos. Para el Tottenham es una victoria más que poco importa, pero para el equipo de Harry Redknapp ganar hubiera significado acercarse al Everton y aumentar las escasas papeletas que aún le restan para llegar al quinto puesto.

Sorprendentemente el Everton volvió a fallar en partidos que últimamente no perdonaba, pero desde el mazazo de la eliminación en Uefa solo ha conseguido un punto de seis posibles, y el calendario que tiene por delante no es nada favorable. Ni siquiera consiguió dominar al West Ham en un partido igualado en el que Yakubu pronto adelantó a los toffees en un ejemplo de fútbol directo, con saque del portero, balón peinado de cabeza y definición certera del nigeriano. Pero en un remate de cabeza Ashton impuso su poderío físico para poner el empate. Y pudo llegar el 1-2 para los hammers si los palos no llegan a impedirlo. El que con su victoria entra en la pelea por la sexta plaza -de momento- es el Blackburn, que aprovechó el respiro que tomó el Wigan, y con doblete de Santa Cruz se impuso a pesar de tener un hombre menos casi todo el partido.

Si hubo un resultado sorprendente esta jornada fue el Aston Villa 0-1 Sunderland, primera victoria para los chicos de Roy Keane a domicilio en toda la temporada, frente a un conjunto al que no es nada fácil hincar el diente, y que al igual que el Portsmouth desaprovechó una buena opción para recortar diferencias. Chopra en el 83’ hizo justicia a un partido donde los suyos intentaron con insistencia. Cuatro puntos tienen ahora de margen el Sunderland sobre el Bolton, equipo que con 26, marca el descenso. No tan sorprendente, pero si es noticia, la primera victoria del Newcastle de Keegan. Fue sobre un equipo desahuciado como el Fulham, cómodamente con tantos de Viduka y Owen. En el choque directo entre Reading y Birmingham, el doblete del defensor Bikey valió a los locales para continuar con el buen camino tomado últimamente, y dejar al Birmingham en la cuerda floja, un solo punto por encima de la quiebra. El Bolton empató sin goles frente al Manchester City, y en un partido sin historia el Middlesbrough superó por la mínima al Derby County, con un gol de Tuncay.